lunes, 5 de enero de 2009

Los pájaros redentores de Timbuktú


Descendientes -según dice la leyenda- del ave fénix y de una extinta especie de hada de colores brillantes, los pájaros maravillosos de Timbuktú moran en las alturas de los frondosos árboles de un parque único, no muy lejos de esa población.

Los invisibles seres que los protegen preparan a diario un alpiste especial que hace que los pájaros cambien constantemente de plumaje y de color, y que canten melodiosamente compitiendo con los coros de ángeles que mencionan algunos libros sagrados.

Las personas que se acercan al lugar embelesadas por ese maravilloso canto y por los alegres colores mutantes de las aves mágicas, quedan protegidas contra los demonios del desierto sin siquiera saberlo.

De esta manera, los misteriosos e inmateriales guardianes del parque mágico de Timbuktú, cumplen con su mandato de rescatar a algunas almas de las garras del temible Irauzú, tenebroso enemigo milenario de la especie humana.